domingo, 13 de noviembre de 2011

Poema de la inmortal memoria de los días que no fui.

Poema de la inmortal memoria de los días que no fui.





Nunca fui Bukowsky

Nunca leí entre borracheras y humo

Porque la ceniza hace lagrimear y hay que sonarse.



Nunca escribí ni un maldito verso maldito

Porque no aprendí-no me enseñaron-a maldecir;

No quise aprender los caminos del odio,

Y la única vez que lo hice vino la Hiedra a salvarme.



Nunca pasé toda la noche en vela velando

Por ver si escribía un poema  o alguien me amaba;

Tan vida sencilla inocente e ingenua

Que en vela solo velé mi espanto de una salud inexistente.



Nunca escupí escribiendo poemas.

(Salvo a los quince años, naturalmente)

Conseguí que el cielo no me devolviera mi mierda.



Nunca fui bohemia, nochetriste ni crápula de salón;

Nunca supe inventarme que sí lo había sido.

Nunca usé la lluvia para echarle la culpa de mi tristeza.



Y toda la nostalgia y el dolor y el desamparo

Que vinieron a visitarme tantos días,

Apenas fueron aconteceres cotidianos que a todo el mundo le suceden.




3 comentarios:

Isolda Wagner dijo...

Me gusta Alena, aunque duele.
Besos y Salud siempre.

catherine dijo...

No fuiste un poeta maldito o tantos otros personajes de moda.
Fuiste tú, con tu vida, tus experiencias propias, lo que encontramos en tu escritura que todos podemos entender.

Amando Carabias dijo...

Pues mejor para todos nosotros. Es que es muy cansino todo esto de la poesía maldita, y los diversos tipos de regurgitaciones que ocupan el lugar donde debiera haber palabras.