miércoles, 4 de agosto de 2010

Residuos.

Soñaban entre las brumas de un futuro incierto
Que un día serían distintos a todos ellos.
Tendrían el alma llena de canciones como banderas
Y las manos generosas abiertas a la Tierra.
Tendrían un amor y una casa con palomas
Y un refugio junto al mar y una noche estrellada
Y cientos de amigos fieles y guitarras y caminos
Y afectos que regalar a cualquiera y libros.

Nunca llevarían corbata ni chaqueta ni galas
Ni irían a las bodas de los mejores amigos
Ni se casarían con el chantaje ni la usura
Ni la mala fe ni la canallada ni el desatino.

Y crecieron naturalmente y creció la desmemoria
La buena imagen, la desbandada, la conveniencia
El traje de chaqueta, la corbata, la imagen planchadita
Y todos los deseables y gratísimos olvidos.

Iban a ser geniales y se quedaron en el residuo
Del ayer que no reconocen haber sido.