miércoles, 24 de marzo de 2010

Labor Cumplida. -25 marzo-2006.- En Memoria-.

No verá el camino mis ojos apartarse,
Ni las sendas me verán reclinada esperando,
Ni me hallará la tarde con las manos vacías,
Ni me encontrará el cielo rodeando los muros.


Me verán de frente las veredas y los senderos,
De pie cara al aire me vislumbrará el horizonte,
Subiendo la colina me recibirán los años,
Mi paso continuará la medida de otros pasos.

Aprendí del árbol a crecer en vertical impulso,
Del árbol Roble que apuntaló mis raíces,
Aprendí que las estrellas están para alcanzarlas
Y que los mares se cruzan sin temer en la orilla.

Así continuo la obra emprendida en la infancia
El trabajo de yunque y la forja del fuego,
Recibiendo la savia del árbol para alzarme
Al tiempo que el crepúsculo en esplendor nocturno
Asiente y conoce que la labor se cumple.

4 comentarios:

Amando Carabias dijo...

Sin saber a quién destinas esta hermosura de poema, este ramillete de versos tan enteros, tan firmes, tan densos, intuyo que sin su labor no serías quien eres y no habrías encontrado la senda de tus pasos, es decir que se trata de alguien tan fundamental, que también tus lectores le debemos agradecimiento.

Isolda Wagner dijo...

Tantas veces pienso, lo ingratos que somos cuando pequeños y se nos educa; no somos capaces de ver la transcendencia que ello supone. Sin embargo, un buen día uno se reconoce en sus progenitores y agradece infinitamente cuánto le ha sido dado.
Como en este momento, mientras leo tus versos y escucho el concierto nº 2 de Rachmaninoff, tantas veces disfrutado en familia.
Besos solidarios.

Flamenco Rojo dijo...

Es de bien nacido ser agradecido.

Un abrazo.

Mercedes Pinto dijo...

¡Vaya! Qué suerte he tenido de que Isolda me recomendara este blog. Es un poema hermoso, sentido y lleno de contenido; como a mí me gustan. Y la música...
También yo intento mantenerme firme y entera, mientras quede camino, siempre avanzando.
Un placer haber conocido este espacio.