lunes, 5 de octubre de 2009

Sorpresa.

En el espacio vacío donde residen las ausencias no se encuentra nada.
O eso pensaba hasta que entró en él, por los caminos del sueño, y los vio a todos.
Y entonces sucedió:
No supo qué decirles...

2 comentarios:

cauchil dijo...

¡¡ Tantas veces la presencia nos deja sin palabras !!. Es la ausencia la que propicia largos soliloquios o ... fue quizá que no supo qué decir porque supo que soñaba.

Amando Carabias dijo...

Los vacíos que provocan las ausencias, son la maceta donde podemos plantar los recuerdos.